Arcanos

Arcanos

Arcanos es una serie fotográfica que nos acerca a esas identidades ocultas que habitan más allá de nuestra percepción visual y racional de las cosas. Nos llevará a un plano, onírico, desconocido y misterioso, donde un código secreto, nos desvelará una naturaleza del hombre diferente en su relación vital con el mundo que le rodea.

Texto por Josep Fábrega  Agea. Barcelona .Abril 2020. Crítico de arte y fotografía.

Arcanos nos aporta algo nuevo, algo no visto, algo no imaginado. Una serie fotográfica dual, dialogante, que nos acerca a esas identidades ocultas que habitan más allá de nuestra percepción visual y racional de las cosas y que nos hace viajar a «un plano, onírico, desconocido y misterioso, donde un código secreto nos desvela una naturaleza del hombre diferente en su relación vital con el mundo que le rodea».

El autor nos replantea directamente el concepto de verdad. Todo lo fotografiado en Arcanos es real, ha existido ante el objetivo, pero en el viaje hacia la mente a través de la percepción, sugiere y conduce a una reinterpretación simbólica, que nos muestra, a través de la creación de Cristóbal Carretero Cassinello, algo que estaba ahí y escapa a la mayoría de los observadores. Hay una doble lectura en cada fotografía, esa ambigüedad es la que le da misterio y fuerza al proyecto. Las sombras representadas se muestran con una vida propia independientes del sujeto fotografiado y  en otros casos,  existen transformaciones misteriosas como en la fotografía “Él oráculo”: la cabeza en el pañuelo de una anciana que se transforma misteriosamente ante nuestros atónitos ojos en la cabeza de un caballo.  Son percepciones de una fracción de segundo. Así mismo, existe una aguda observación de todo aquello que transciende de la interacción del sujeto con la luz y las sombras poniendo en un segundo plano al propio fotografiado. Esta dualidad fotográfica es una herramienta de desencriptación para códigos preexistentes pero ocultos.

En esta serie Cassinello ejerce como “fotógrafo-médium” que nos muestra abstracciones de la realidad, que dan otro sentido a lo percibido y que nos cuestiona nuestra percepción racional, nuestros preconceptos. Nos devuelve la mirada libre de un niño, nos libera de la castración estética ejercida por la Academia, por lo dominante, por el -Super-Yo- sociocultural y nos devuelve al –Ello- de lo instintivo, del sentimiento, configurando un nuevo -YO -perceptivo y abierto. Si hay algo que debería premiarse, valorarse y promocionarse es la capacidad de un fotógrafo de mostrar lo que yacía en la invisibilidad, esos mundos que a través de un encuadre, de una luz y de una sombra, de esa dualidad interactiva entre imágenes, hacen aflorar en nuestra mente (como surgía la imagen en la cubeta de revelado) esa identidad estética oculta que nos fuerza  a la percepción de lo invisible y abre nuevos caminos en la fotografía de calle.

Facebook
Instagram